La disputa sigue al fallo del Tribunal Constitucional
La coalición tripartita del canciller alemán Olaf Scholz ha llegado a un acuerdo sobre el presupuesto para el próximo año después de un mes de negociaciones que siguieron a un fallo del tribunal constitucional que trastocó los planes financieros del gobierno.
En un esfuerzo por abordar un déficit de financiación de 17 mil millones de euros (18,33 mil millones de dólares), el gobierno tiene la intención de implementar recortes de gasto en ciertas áreas. También planea reintroducir un límite al nuevo endeudamiento neto en 2024, al menos inicialmente.
A continuación se presentan algunas reacciones clave al proyecto de presupuesto para 2024:
Monika Schnitzer, presidenta del Consejo de Expertos Económicos de Alemania
Según Monika Schnitzer, es sensato dejar abierta la posibilidad de justificar situaciones de emergencia para necesidades de gasto específicas, como la ayuda para la catástrofe de las inundaciones en el valle del Ahr y la ayuda a Ucrania. No es sorprendente que los socios de la coalición no pudieran llegar a un acuerdo para declarar otra situación de emergencia para 2024. Esto genera preocupación si el presupuesto para 2024 solo puede equilibrarse agotando las reservas restantes.
Joerg Kraemer, economista jefe de Commerzbank
Joerg Kraemer acoge con satisfacción el intento del gobierno alemán de evitar la suspensión del freno de la deuda durante el próximo año. Considera las resoluciones como compromisos típicos, en los que cada parte involucrada hace concesiones para cerrar la brecha presupuestaria. Sin embargo, los importantes aumentos de las tasas de interés por parte de los bancos centrales de todo el mundo para combatir la alta inflación tendrán un impacto mayor en la economía. Commerzbank sigue anticipando una contracción del 0,3% del producto interior bruto de Alemania el próximo año.
Carsten Brzeski, director global de Macro en ING
Carsten Brzeski considera que, en general, las medidas anunciadas parecen manejables para la economía. No obstante, el debate en curso sobre la combinación de inversiones a gran escala y presupuestos equilibrados persistirá incluso después de este anuncio. Con una política fiscal volviéndose restrictiva y un alto nivel de incertidumbre política, existe un riesgo considerable de que la economía alemana experimente una ligera recesión el próximo año.
Clemens Fuest, presidente del Instituto IFO
Clemens Fuest considera que el acuerdo presupuestario es un paso en la dirección correcta, aunque quedan algunas preguntas sin respuesta. Es digno de elogio que el gobierno federal no haya optado por el camino fácil de declarar una emergencia presupuestaria. En cambio, redujo el gasto, en particular los subsidios, y aumentó ligeramente los impuestos ambientales, como el precio del CO2.